ELABORACIÓN DE TINTURAS CON PLANTAS MEDICINALES
Las tinturas son preparaciones alcohólicas líquidas obtenidas por extracción (maceración o percolación) de una droga con alcohol de una graduación determinada, generalmente entre 60 y 90% Esta graduación depende de la solubilidad del principio activo a extraer. Las tinturas pueden prepararse también por disolución o dilución de un extracto en alcohol de concentración adecuada. En tal caso, el contenido en etanol y en constituyentes, o el contenido en etanol y el residuo seco deben corresponder al de tinturas obtenidas por maceración o por percolación.
También se pueden elaborar tinturas cuyo excipiente además de alcohol contenga agua, con lo cual estaremos preparando una tintura hidro-alcohólica.
La RDE o relación droga/extracto en las tinturas es generalmente 1:5 (masa:masa o masa:volumen). Con algunas drogas, sin embargo, se preparan más diluídas, con una RDE de 1:10, como en el caso de tintura de árnica, de salvia o de hoja de belladona. En caso conveniente pueden utilizarse otras RDE. En las tinturas normalizadas no es necesario indicar la RDE, ya que se definen por un determinado contenido de de constituyentes con actividad terapéutica reconocida.
Las tinturas son una excelente manera de conservar las propiedades de las plantas, extrayendo los principios activos de las mismas mediante su maceración en alcohol y cuyas ventajas las podemos resumir en:
- Versatilidad: las tinturas pueden utilizarse con multitud de finalidades, ya sea en uso interno, externo, como materia prima para realizar otros preparados, en baños, cosmética natural, etc.
- Concentrado de propiedades: muy pocas gotas concentran las propiedades de sus principios activos.
- Disponibilidad permanente, ya que al ser alcohol su medio de consevación, su duración en principio es indefinida para su uso terapéutico. Necesariamente han de cumplirse unos principios básicos de acondicionamiento, como son el envase herméticamente cerrad, en cristal que impida el paso de la luz, conservando el producto en un sitio limpio y seco.
- El alcohol es un medio ideal de extracción, ya que es capaz de extraer más principios activos que el agua de la infusión, decocción o percolación.
- Lo más indicado es utilizar la planta fresca, con mayor poder terapéutico: cultivada personalmente o adquirida en algún comercio de garantía.
- Disponibilidad de las plantas: la tintura nos garantiza que tendremos los principios activos de la planta durante mucho tiempo en perfectas condiciones, al estar disponible para su uso en caso de necesidad esporádica.
Elaboración de una tintura:
Planta medicinal
Cuando hablamos de planta de manera genérica, nos referimos a la parte de la misma donde están contenidos sus principios activos, la droga, por tanto a las hojas, tallos, flores, frutos, semillas, corteza, raíces o rizomas.
Siempre que sea posible se elaborará la tintura con planta fresca, esto aumenta de manera considerable el contenido en principios activos y propiedades terapéuticas.

Disolvente
La graduación puede oscilar entre un mínimo del 60% de etanol hasta el 90%. Este porcentaje estará en función del tipo de droga: en el caso de flores u hojas trabajaremos con el porcentaje más bajo y si tratamos de extraer principios activos procedentes de cortezas o resinas nos inclinaremos por las graduaciones más altas.
En el caso de preparados para uso interno, debe utilizarse siempre alcohol apto para su consumo o bien otros disolventes como aguardiente o vodka.
Elaboración
Es necesario utilizar recipientes de cristal que podamos cerrar herméticamente, limpios y esterilizados.
Se llenarán con la droga, ya sea entera, cortada, picada o molida, dependiendo de las características de la parte de la planta utilizada
Teniendo en cuenta la relación drogar extracto, se añadirá la cantidad adecuada de alcohol, mezclando su contenido mediante agitación. Es necesario diferenciar la tintura elaborada con planta fresca o planta seca, ya que en este último caso la RDE deberá ser la mayor (1:5)
Se cierra el envase y almacenamos en un lugar oscuro, limpio y seco. Es importante etiquetarlo adecuadamente detallando el contenido, la proporción utilizada y la fecha de elaboración.
Maceración
Se puede utilizar la tintura tras un período de maceración entre 7-15 días dependiendo de la droga, si bien, se puede mantener hasta varios meses en maceración si ello fuera recomendable para extraer la totalidad de sus principios terapéuticos.
Durante el período de reposo de la tintura, es necesario agitar el envase periódicamente, a diario si fuera necesario, observando siempre que la planta quede totalmente cubierta por el alcohol. Los primeros días podríamos notar que el nivel de alcohol desciende, hay que cubrir de nuevo hasta recuperar el volumen inicial.
Filtrado
Para el filtrado es necesario utilizar medios de tamiz muy fino, como coladores de tela, gasa, algodón, filtro de papel o un paño bien esterilizado para recuperar adecuadamente todo el líquido que se ha extraído y que es extremadamente valioso. Por ello, es importante asegurarnos de que no quedan restos de planta en la tintura.
Por último es necesario acondicionar la tintura, para lo que trasvasaremos el líquido a un envase de cristal opaco, etiquetándolo con contenido, proporciones y fecha, para posteriormente almacenarlo en un lugar limpio y seco, alejado de fuentes de calor y de la luz.

Caducidad
Al tratarse de una elaboración en medio alcohólico, en principio su conservación será indefinida, pero condicionada a las particularidades de acondicionamiento, conservación, manipulación y de la graduación del alcohol utilizado, así, la elaboración de la tintura con planta fresca en un medio alcohólico de baja graducación debería tener una capacidad de conservación de todos sus principios activos que la de una planta seca o resina disuelta en alcohol de alta graduación.
En cualquier caso estamos hablando de pequeñas diferencias, habida cuenta de que una tintura preparada con alcohol puede llegar a mantenerse con todas sus propiedades hasta cinco años y más.
Uso Interno
Una tintura elaborada artesanalmente, tiene la ventaja de poder contar con una materia prima excelente y un proceso que garantiza una magnífica calidad. En cualquier caso, los productos naturales no pueden estar estandarizados, ya que si bien conocemos sus principios activos, no se puede garantizar la proporción de los mismos, y por añadidura su biodisponibilidad, ya que dependen de las características del medio en el que se ha desarrollado la planta, como son la altura, la temperatura, la luminosidad, etc. en una palabra su ecosistema.
Sin embargo, el cultivo controlado de la misma planta, en particular por la persona que realizará el preparado, garantiza el conocimiento de los principios activos y la concentración de los mismos en la droga, una vez controlada la fase vital, época de recolección y lugar de la misma, con lo cual podremos conseguir una mayor control de sus efectos terapéuticos al preparar la tintura, por lo lo que a la hora de administrar el preparado nos encontraremos con una mayor garantía de eficacia, manteniendo siempre el principio de prudencia en cuanto a contraindicaciones y dosis.

Posología
Las tinturas suelen administrarse vía oral diluídas en agua, infusión o zumos, comenzando con una dosis baja, para prevenir efectos secundarios, aumentando la dosis hasta llegar a la requerida.
En cuanto a la frecuencia, lo habitual es tomar el preparado 3 veces al día, pudiendo llegar en casos puntuales cada hora incluso menos, dependiendo del tipo de afección, fundamentalmente en trastornos agudos transitorios como puede ser hiperacidez gástrica o trastornos nerviosos.
En cuanto a su uso tópico o intradérmico, las tinturas pueden ser un excelente complemento al tratamiento oral y las posibilidades de aplicación son diversas.
- Se pueden usar directamente o mezcladas con otros elementos para desinfectar, masajear un área dolorida, en un baño, añadidas a preparaciones cosméticas, para problemas de piel, cabello, como enjuague bucal, gargarismos… etc.
- También se pueden utilizar a modo de compresa. Las compresas se pueden preparar de muchas maneras, bien empapando un paño en la tintura pura, o en la tintura diluida en agua, infusión, vinagre… Podemos tapar la compresa con un paño seco para potenciar su acción.
Interacciones
En principio las interacciones de los preparados vegetales con otros medicamentos son escasas. No obstante y para el caso de no tener un conocimiento exacto de las mismas, como norma general lo mejor es no administrar nunca ningún preparado terapéutico de origen vegetal media hora antes y hora y media después de tomar algún medicamento.
No hay que olvidad que, en contra de la creencia general, que los preparados de plantas medicinales son inocuos. Las tinturas como concentrados muy activos de las virtudes de las plantas, pueden ser tóxicas si se sobrepasan las dosis adecuadas. Así pues, tendremos muy en cuenta las recomendaciones sobre toxicidad de cada planta y seremos conscientes de que una tintura tiene mayor potencial de toxicidad al ser un concentrado.
Observaciones
No debemos olvidar que la fitoterapia es un complemento de la medicina alopática, y que no todas las plantas son adecuadas para preparar tinturas, algunas pueden ser muy tóxicas, por lo tanto antes de hacer una tintura hay que asesorarse bien.
Por tanto, conviene consultar con el especialista la administración de medicamentos basados en plantas para tener absoluta garantía de que no existen contraindicaciones o interacciones con el tratamiento que se sigue habitualmente.
Por último hay que hacer constar que la cantidad de alcohol que se ingiere con la tintura es realmente baja, sobre todo si tenemos en cuenta que sólo se toman por gotas, que además no son alcohol puro, sino que solamente tienen una proporción del mismo. De todas formas, conviene que aquellas personas que no deban tomar alcohol, prescindan de su uso.
